FELIZ Y CONTENTO es enlace habitual de sentido claro: en un estado psicológico de notable placidez; muy a gusto y con muy buen estado de ánimo.
Ejemplos de uso:
- Yo estaba metido en la cama, feliz y contento.. Entonces sonó el teléfono, es lo que siempre pasa en esas raras situaciones en las cuales estás realmente a gusto. Ramón Palomar. Las Provincias,1-12-1996.
- Feliz y contento de haberse quitado de encima la pesadilla del divorcio, no tiene ganas de acometer la renovación del servicio doméstico. Federico Jiménez Losantos. ABC, 26-1-1991.
- [Diálogo en comienzo de sección de programa de radio a la que se incorpora, como colaboradora, Pilar Fernández Carrillo:] -[Federico Jiménez Losantos] Qué feliz te veo hoy. -[Pilar Fdez.Carrillo] Sí, porque veo a la gente de aquí del estudio, que está feliz y contenta, y yo no voy a ser menos. Radio COPE,26-5-2004.
- [En transmisión de combate de boxeo, comentario sobre el ganador del mismo:] Pues ahí le tienen, feliz y contento, al púgil kazajo.[..] Habrá que seguirle con atención: Gennady Golovkin. Jorge Lera. Eurosport [TV],21-9-2006.
- [En entrevista de Juan Carlos de la Iglesia al actor y cineasta Santiago Segura:] -[Juan Carlos] ¿No te has sentido nunca solo, triste…? -[Santiago Segura] ¿Triste? Todos los días cuando me miro al espejo por la mañana… pero solo, no. -[Juan Carlos] Tampoco te has deprimido? -[Santiago Segura] Sí, sí. Pero no me deprimo por soledad, sino por otras cosas. Soy un ciclotímico que puedo deprimirme mucho, pero al rato estoy feliz y contento porque ponen mi programa favorito en televisión. MAN, marzo 1998.
- Esta expresión fue usada por un hombre en la emisión del 5-3-1999 del programa Benvinguts de la televisión pública autonómica valenciana Canal 9.
- FELIZ Y ENCANTADO (Raro): En los años postreros del franquismo y primeros de la monarquía [la década española de 1970] los concursos en televisión proliferaban y el premio máximo para los concursantes era siempre un coche.[..] El coche se elegía siempre, aún a costa de renunciar a premios más valiosos. Así que preguntaba el presentador.. <<Si acierta la última pregunta podrá elegir entre este maravilloso coche o un chalé en Torremolinos valorado en diez millones de pesetas. ¿Qué prefiere, el coche o el chalé?>>; y el concursante miraba al ingenio rodante con ojos de merluza enamorada y respondía sin titubeos: <<¡El coche!>>. Y se lo llevaba feliz y encantado, cuando de haber elegido el chalé en Torremolinos podría haberlo vendido y comprarse nueve coches del mismo modelo. Alfonso Ussía. ABC,18-4-2003.

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